Solo el 14% de los alcaldes europeos ve asequible el precio de la vivienda en sus ciudades

El precio de la vivienda asfixia cada vez más a Europa. Es una crisis que afecta especialmente a los países del sur y el oeste del continente, pero que cada vez avanza más en los países nórdicos. Son las conclusiones de una encuesta de la red de grandes ciudades (Eurocities), que califica de “emergencia” la situación en el caso de España. El sondeo, en el que han participado 86 alcaldes de grandes ciudades de 26 países de la UE, refleja que la vivienda se ha convertido en su segunda preocupación, por detrás de la acción climática.

Y es que solo el 14% de los regidores encuestados considera que el precio de la vivienda es asequible en sus ciudades frente al 39% considera que no hay acceso asequible a la vivienda. Un 47% reconoce que está en riesgo de no ser asequible. “Este año la vivienda asequible se han convertido en la principal prioridad para uno de cada seis alcaldes, el doble que el año pasado”, señala Eurocities.

“Solo uno de cada siete alcaldes encuestados afirma que sus ciudades ofrecen viviendas accesibles, con puntuaciones de siete o más en la escala de asequibilidad. Entre estas ciudades se encuentran las que han conseguido mantener la asequibilidad gracias a sólidas políticas de vivienda pública, aumentos controlados de los alquileres o una inversión sostenida en vivienda social”, recoge el informe, que menciona Viena como la ciudad “más asequible” para vivir en Europa debido a su “largo compromiso con la vivienda pública y social”. Su modelo llega al 62% de la población. “El 75% de los vieneses pueden optar a una vivienda social, municipal o cooperativa porque los umbrales de renta son bastante altos, lo que significa que mucha gente está cubierta”, explicó en una entrevista en elDiario.es Michaela Kauer, experta en vivienda y representante de la ciudad ante la UE.

En el lado opuesto de la balanza se encuentra Barcelona, que “registra la peor crisis de asequibilidad, reflejo de la emergencia inmobiliaria más amplia de España, donde la elevada demanda, la especulación inmobiliaria y la limitada oferta de nuevas viviendas están empujando los precios más allá de lo asequible”, según recoge el informe de Eurocities. El alcalde de la ciudad condal, Jaume Collboni, es uno de los que ha participado en la encuesta, además de Madrid o Valencia, forma parte de un grupo de regidores que está presionando en Bruselas para que se pongan en marcha medidas que permitan paliar los efectos de la crisis.

Entre las medidas que reclaman está que la inversión en vivienda no compute para la deuda y el déficit, como la UE ha aprobado para disparar el gasto en defensa, o que los municipios puedan gestionar de manera directa los fondos europeos destinados a esa partida. Por el momento, la gran medida que prevé adoptar la Comisión Europea es un cambio en las ayudas de estado para permitir que los países puedan aumentar las inversiones en materia de vivienda. A pesar de que la UE reconoce que la vivienda se ha convertido en una prioridad, el plan europeo para la vivienda asequible aún tendrá que esperar hasta 2026.

Entre las ciudades más afectadas también se encuentran Amsterdam, Zurich, Florencia, Roma o Bolonia. “Para cerca de la mitad de las ciudades europeas (47%), la asequibilidad de la vivienda se mantiene en una categoría «moderada», lo que significa que aún no es una crisis aguda pero sigue siendo una preocupación creciente. Estas ciudades, entre las que se encuentran muchas del centro y el norte de Europa, corren el riesgo de caer en la inasequibilidad si los precios de la vivienda y los alquileres siguen creciendo más que los ingresos”, alerta Eurocities en las conclusiones de la encuesta.

“La crisis de la vivienda en nuestras ciudades está fuera de control”, afirma Mathias De Clercq, Presidente de Eurocities y Alcalde de Gante. “La UE debe trabajar con las ciudades para crear un Plan Europeo de Vivienda Asequible eficaz, con un fondo de la UE dedicado a la vivienda por vía rápida para apoyar la vivienda asequible, el apoyo a las asociaciones público-privadas y la ayuda a soluciones de construcción sostenibles e innovadoras”. Collboni acaba de ser elegido vicepresidente de la entidad y aseguró que la vivienda será una de las prioridades de su cargo.

Las causas de la crisis son muy variadas, aunque el principal motivo es la falta de oferta respecto a la demanda, según reconocen el 76% de los alcaldes. “En las ciudades que experimentan un fuerte crecimiento económico o un rápido aumento de la población, el ritmo de puesta a disposición de viviendas -ya sea mediante la construcción de nuevas viviendas, la reutilización de edificios vacíos o la reintroducción en el mercado de viviendas infrautilizadas- no es lo suficientemente rápido como para satisfacer la demanda. Incluso cuando las ciudades amplían la disponibilidad de viviendas, el aumento de los costes las hace inasequibles para las personas que más las necesitan”, expone Eurocities.

“La inflación, la escasez de mano de obra, las interrupciones en la cadena de suministro y el aumento del valor del suelo están encareciendo la construcción de viviendas a precios asequibles. A medida que aumentan los costes, los promotores dan cada vez más prioridad a las viviendas de gama alta, dejando un vacío cada vez mayor para los residentes de rentas medias y bajas”, agrega el informe que menciona Zagreb como una de las ciudades que está experimentando esa situación (71%).

“La disponibilidad limitada de suelo es un problema importante para el 60% de las ciudades encuestadas, sobre todo en aquellas con leyes de zonificación estrictas, zonas históricas protegidas o limitaciones geográficas. Aunque las limitaciones de suelo suponen barreras reales, algunas ciudades están explorando estrategias alternativas como la densificación, los desarrollos de uso mixto y la conversión de espacios comerciales vacíos en viviendas residenciales. La especulación inmobiliaria está expulsando a la población local de mercados clave, sobre todo en zonas de gran demanda. Aunque no se trata de un problema universal, el 29% de las ciudades consideran que la inversión especulativa es una de sus tres principales preocupaciones”, agrega el documento sobre las causas.

Los alquileres vacacionales son una de las causas que menciona el 25% de los encuestados. No es, por tanto, un problema generalizado, pero sí especialmente preocupante para las ciudades turísticas, como Barcelona, Roma, Atenas y Budapest, que se encuentran entre las más afectadas,