Ni Ucrania ni Alaska: Rusia se prepara para el conflicto con la OTAN en este nuevo campo de batalla

Estados Unidos y Rusia están a pocos kilómetros de distancia. En el remoto mar de Bering, la isla estadounidense Little Diomede se encuentra justo al lado de la isla rusa Big Diomede, y es en este punto geográfico donde Vladímir Putin gana progresivamente control gracias al cambio climático. 

Según publica el diario británico The Independent, la región forma parte de un centro de seguridad en el flanco norte de la OTAN, y, por ello, la presencia militar rusa ha estado creciendo durante años. Además, el deshielo de los casquetes polares se ha convertido en una oportunidad económica y militar que Moscú no ha desaprovechado. 

De acuerdo a la información difundida, para finales de este 2025, Rusia planea desplegar una flota de más de 20 rompehielos nucleares, y con ello, liderará el mundo de la excavación a través del Ártico. Estos buques facilitarán la búsqueda de los «vastos recursos minerales» que se quedan atrapados bajo el hielo derretido. Estados Unidos, por su parte, sólo tiene tres de estos rompehielos.

El Centro Nacional de Datos de Nieve y Hielo de Estados Unidos, data que el nivel de hielo del Ártico ha disminuido un 40% desde 1979. Tal y como desvela el medio, esto significa que Rusia puede abrir nuevas rutas marítimas, y probablemente mantenerlas abiertas. Además, de este modo, la distancia entre los centros de fabricación asiáticos como China y Europa se están reduciendo en aproximadamente un 40%, ahorrando millones de euros en combustible. 

En declaraciones recogidas por el digital, el secretario de Relaciones Exteriores de Reino Unido, David Lammy, asegura que esta remota zona ártica «siempre ha sido importante» para la Alianza atlántica. «Es una de las regiones donde Rusia puede moverse hacia Occidente». 

Además, tal y como se avanza en la publicación, la Flota del Norte de Rusia ha movilizado en el lugar submarinos avanzados de propulsión nuclear, capaces de lanzar ataques estratégicos con misiles desde debajo del hielo. «Para consolidar su posición», Rusia ha construido nuevas bases militares en el lugar y mejorado las existentes (Franz Josef Land y Novaya Zemlya).

Por último, al elegir este lugar para el primer cara a cara entre el presidente Trump y Putin, se ha llamado «inadvertidamente la atención» del mundo sobre otro peligro «claro y presente».