Luis Enrique: «No soy una estrella. Acertaba más cuando perdía y me criticabais a muerte»

Luis Enrique está a un paso de ganar el Mundial de clubes con el PSG, guinda extraordinaria a una temporada sensacional, en la que el conjunto parisino ha levantado la Ligue 1, la Copa de Francia y la Champions League, venciendo con contundencia al Inter de Milán en la final (5-0). Tras el 4-0 ante el Real Madrid en semifinales, el entrenador asturiano admite que «no soy una estrella» y que «acertaba más cuando perdía y me criticabais a muerte».

«Acertaba más cuando perdía y me criticabais a muerte. Ahora como ganamos creéis que lo hago todo bien y no, sigo cometiendo muchos errores, me equivoco infinidad de veces… Pero como lo que se ve es el resultado, parece que lo hago todo bien. No. Lo hacía mucho mejor cuando perdíamos», respondió contundente el entrenador, orgulloso de una temporada «extraordinaria».

El técnico español ha conseguido olvidar a las antiguas estrellas del PSG, desde Ibrahimovic a Mbappé pasando por Neymar o Messi. «Hay que ser un equipo con once estrellas, no con una. Ese es el fútbol y el objetivo que tenemos. No queremos sólo una, queremos once, trece, quince… Que la verdadera estrella sea el equipo. Eso lo representa nuestro club. Volveremos a perder, seguro. Queremos estrellas, pero al servicio del equipo», aseguró, sin dar nombres pero deslizando de nuevo la importancia del bloque.

Aún así, el protagonismo del grupo francés se lo lleva el propio Luis Enrique, estrella, para muchos, del PSG. «Yo de estrella tengo cero… Me gusta el trabajo que hago. Disfruto de mi carrera especialmente en los momentos delicados. Cuando no van bien las cosas, me siento mejor. Es bonito cuando todo funciona porque lo mejor de ganar es hacer feliz a las personas que nos siguen. Pero he estado mucho mejor cuando se me ha criticado que cuando se me ha elogiado», volvió a insistir.

Cuestionado sobre la calidad de su equipo y si es la mejor temporada de su vida, el asturiano recordó al Manchester City de Pep Guardiola. «Los elogios vienen si ganamos. El mejor equipo de la última década ha sido el Manchester City de Pep Guardiola, pierden diez partidos y ya los matan. Sigue siendo el mejor entrenador y sigue siendo un equipo increíble, pero esta es la alta competición, lo entendemos.

Sobre el Balón de Oro, volvió a repetir que «no soy mucho de premios individuales», pero destacó la temporada de Ousmane Dembélé. «El equipo está por encima de las individualidades. Sin ninguna duda Ousmane ha sido el mejor de la temporada por goles, asistencias, pero sobre todo porque el trabajo, que ha sido lo que ha hecho que el PSG conquiste todos los títulos en los que ha participado hasta ahora. Esa debe ser la condición para que un jugador sea premiado de manera individual. Ahí sí lo tengo claro».