Las dimisiones por los currículums falsos desatan una riada de borrados y correcciones

Los partidos políticos están utilizando el verano para depurar sus currículums públicos. El caso de la ya exdirigente del PP Noelia Núñez, que se vio obligada a dimitir el pasado 23 de julio tras haberse inventado sus estudios, abrió una veda que ha provocado otras dos dimisiones, la del socialista Jose María Ángel y la del consejero extremeño con PP y Vox Ignacio Higuero, mientras ya son un buen puñado los políticos que se han visto forzados a corregir sus perfiles públicos por haber engordado sus trayectorias con estudios o títulos falsos. Este mismo lunes cambió su currículum público el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, del PP, y durante el fin de semana se conoció que el presidente del Senado, Pedro Rollán, del mismo partido, también modificó el suyo por incluir formaciones que, en realidad, nunca recibió.

Los movimientos de los últimos días evidencian que entre algunos dirigentes públicos falsear sus trayectorias se ha convertido en una práctica recurrente, en un país en el que el sufragio pasivo es universal y, por tanto, todo ciudadano tiene derecho a ejercer como representante de la soberanía nacional, regional o municipal y a presentarse a las elecciones independientemente de la formación que tenga o los trabajos previos que haya realizado.

Pedro Rollán, actual presidente del Senado, incluyó por ejemplo en los currículums que presentó en las instituciones en las que estuvo anteriormente estudios que ahora no incorpora en su ficha de la Cámara Alta. Cuando era alcalde de Torrejón de Ardoz (Madrid), Rollán aseguraba tener una diplomatura en Marketing en la Escuela Superior de Estudios de Marketing, tal y como figura todavía en la web del consistorio. Estos estudios figuran, además, en su ficha en la web del PP. Cuando era alcalde también aseguró tener un máster en Administración y Dirección de Empresas en la misma escuela. Pero ni la diplomatura ni el máster figuran ahora en su currículum del Senado.

Fuentes de la Presidencia de la Cámara Alta consultadas este lunes por elDiario.es restaron importancia a esta contradicción y la redujeron a una decisión de Rollán, que ahora obvia estos títulos en su currículum por su carácter privado y no oficial, y porque son “de hace muchos años”. De hecho, el periodista Antonio Maestre adelantó este fin de semana en La Sexta que la Escuela Superior de Estudios de Marketing en la que cursó Rollán no puede emitir titulaciones universitarias oficiales, ya que se trata de un centro registrado de ‘Educación secundaria técnica y profesional’.

También ha modificado su currículum Xavier García Albiol, alcalde de Badalona y flamante presidente del congreso nacional del PP de julio en el que Alberto Núñez Feijóo fue encumbrado como presidente. En la web del ayuntamiento barcelonés García Albiol ya no figura como licenciado en Derecho, que era lo que figuraba hasta ahora en su currículum oficial, sino graduado en dicha materia. Es decir, que no poseía una licenciatura, título correspondiente a una carrera de cinco años en el plan antiguo, sino un título de grado, la equivalente en la actualidad. Albiol no completó sus estudios de Derecho de joven, cuando los inició en la Universitat de Barcelona, sino tiempo después cuando ya era un conocido dirigente del PP catalán, a través de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), que imparte formación a distancia.

Ana Millán, la vicepresidenta de la Asamblea de Madrid y ‘número tres’ del PP de Isabel Díaz Ayuso, se presentó al menos en dos ocasiones ante sus vecinos de Arroyomolinos, localidad al suroeste de la Comunidad de Madrid de la que fue alcaldesa, como “licenciada en Ciencias Políticas”, una titulación que nunca ha obtenido, según reconoce la propia Millán y ha adelantado la Cadena Ser. En la propaganda electoral que el PP de ese municipio distribuyó en 2003 y en 2007 incluyó esos estudios que no realizó. “Se cirscunscribe a un error en un folleto publicitario”, se ha justificado este lunes Juan Bravo, responsable económico del PP, al ser preguntado en rueda de prensa.

Ni Millán, ni Rollán, ni Albiol tienen pensado dimitir como sí hizo el 23 de julio su compañera de partido Noelia Núñez tras conocerse que mantenía tres versiones de su currículum en tres webs diferentes (Ayuntamiento de Fuenlabrada, Congreso de los Diputados y la Universidad Francisco Marroquín –sus títulos no tienen reconocimiento oficial en España–, donde se suponía que era profesora) y ninguna de ellas era cierta. Hasta el mes pasado, decía tener el doble Grado en Derecho y Ciencias Jurídicas de las Administraciones Públicas. En otro de sus currículums añadía, además, que era filóloga en lengua inglesa.

Versiones diferentes en distintas instituciones

Tras ser pillada, Núñez reconoció que había comenzado Derecho en la Universidad Complutense de Madrid, y luego trasladó el expediente a la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), donde comenzó “el Grado en Estudios Ingleses” para, en 2019, matricularse en un grado combinado “de Derecho y Ciencias Jurídicas de las Administraciones Públicas”. No ha terminado ninguno de sus estudios. Y la mentira hizo que la dirigente, que había sido ascendida por Feijóo hacía solo unas semanas, tuviera que dimitir de todos sus cargos tanto en el partido como en las instituciones.

Su caso, que el PP presentó como ejemplarizante a pesar de que Núñez mintió en sus currículos durante años, forzó la revisión de los perfiles públicos de políticos en todos los ámbitos. La pasada semana elDiario.es desveló, por ejemplo, que una veintena de altos cargos de la Generalitat incumplían la ley de transparencia al no publicar la titulación académica que dicen tener. Esta información provocó una suerte de “pánico” en el Consell que preside Carlos Mazón donde, según ha podido saber este diario, se ha dado la orden de buscar rápidamente todos los documentos acreditativos.

Uno de sus cargos de confianza, el conseller de Infraestructuras, Javier Sendra, mintió en su currículum en la Diputación de Alicante al afirmar que tenía dos másteres. Posteriormente, rectificó el documento y apuntó que eran cursos. Pero al saltar al Gobierno autonómico, uno de estos títulos volvió a ser un “máster” de alta dirección en el currículum que hay en la web oficial de la Generalitat cuando en realidad es un curso de 140 horas que imparte una escuela privada de negocios en Alicante.

Antes de que estallara el caso de Núñez ya hubo dirigentes del PP que fueron modificando su currículum que había sido inflado con estudios inexistentes. Es el caso del presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, que, según la web del Congreso, en 2000 era licenciado en Administración y Dirección de Empresas, en 2004 perdió la licenciatura y ya lo que figuraba eran estudios en Dirección y Administración de Empresas y en 2008 la cosa se quedaba en un máster en Dirección y Administración de empresas, una titulación que mantuvo hasta 2011 en sus perfiles públicos. Ahora, en el currículum oficial de la Junta, ni siquiera aparece ese máster.

También ocurrió con la alcaldesa de Santander, del PP. Gema Igual pasó en 2017 de “diplomada en Magisterio” a tener estudios en ese ámbito, tal y como desveló entonces elDiario.es. Y este lunes, Diario de Noticias de Navarra desveló que el presidente del PP de Navarra y parlamentario foral, Javier García Jiménez, había corregido su currículum oficial en la web del Parlamento de Navarra. Durante años se le mencionaba como titulado en un supuesto Grado en Gestión Comercial y Marketing, pero, en realidad, el dirigente popular cursó entre 2013 y 2014 un título propio en la ESIC Business & Marketing School que no es una titulación universitaria oficial.

Munición política entre partidos

Pero el caso de las trayectorias académicas infladas o directamente inventadas trasciende las fronteras del PP y ya afecta a otras dos formaciones políticas. En los últimos días, de hecho, se ha producido la dimisión del presidente del PSPV y comisionado del Gobierno para la dana y también de un consejero de la Junta de Extremadura que perteneció a Vox. Y se ha convertido, por tanto, en munición política para las acusaciones cruzadas entre partidos, en un intento de extender las sospechas a muchos más responsables políticos.

En el caso de los socialistas, se trata de José María Ángel, un histórico del partido en la Comunitat Valenciana y actual comisionado del Gobierno para la Reconstrucción y Reparación de los daños provocados por la dana. Ángel presentó su dimisión tras ser acusado de falsificar un título de la Universidad de Valencia, según la Agencia Antifraude valenciana. Una formación que, además, le habría ayudado a progresar como funcionario de carrera de manera presuntamente fraudulenta, en el caso de que se demuestre una acusación que ya investiga la Fiscalía Anticorrupción.

Aunque el PSOE aceptó esa dimisión como mejor salida posible para el partido y para el propio dirigente, también ha usado el caso entre sus propias filas como munición contra Carlos Mazón, al que acusa de manipular la Oficina Antifraude para una operación política. “Mazón asalta la Agencia Antifraude para utilizarla contra sus adversarios políticos, está creando la Kitchen valenciana”, afirmó el portavoz del PSOE en el Parlamento valenciano, José Muñoz.

Justo un día después de la dimisión del comisionado de la dana, otro caso saltó en Extremadura. El consejero Ignacio Higuero, que entró a formar parte del Gobierno de María Guardiola de la mano de Vox antes de romper con la formación de Abascal para mantenerse en su puesto en la Junta con el PP, admitió haber mentido al incluir en su currículum que era licenciado en Marketing por el CEU en 1993, aunque esos estudios no arrancaron en España hasta 2009.