El Gobierno de Israel está estudiando la última respuesta presentada esta madrugada por Hamás a los mediadores (Qatar, Egipto y Estados Unidos), la cual recoge un alto el fuego de 60 días en la Franja de Gaza, informó este jueves la Oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu.
«Los mediadores han entregado la respuesta de Hamás al equipo negociador israelí y esta se encuentra actualmente en revisión», recoge el breve comunicado de la Oficina del mandatario conservador.
Ya anoche, los mediadores cataríes y egipcios confirmaron haber recibido la respuesta del grupo islamista Hamás a su última propuesta de tregua, según aseguró a EFE una fuente de seguridad egipcia. Esta fuente, cercana a las negociaciones, aseguró que los mediadores «no están satisfechos» con la respuesta del grupo palestino y pidieron a Hamás «algunas mejoras» para que las negociaciones con Israel continúen.
La actual propuesta sobre la mesa plantea una tregua de 60 días, durante la cual Hamás e Israel deberán negociar su continuación en un alto el fuego permanente. El borrador de este plan plantea que, de no alcanzar las partes un acuerdo sobre el día de después de la tregua, esta podía prolongarse hasta que lo alcanzaran.
En esos dos meses, los islamistas liberarían y entregarían a 10 rehenes vivos y 14 muertos a Israel a cambio de la liberación de presos palestinos. En total, Hamás retiene todavía a 50 cautivos de los que Israel estima que solo una veintena siguen con vida.
De acuerdo con el periódico israelí Ynet, las garantías por parte de Israel y Estados Unidos para asegurar el fin de la ofensiva solo son verbales, mientras que Hamás en su última respuesta habría pedido que se incluya por escrito.
Ya ayer, los ministros radicales y colonos israelíes, tanto el de Finanzas, Bezalel Smotrich, como el de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, urgieron a Netanyahu, «ante la aparente negativa de Hamás», a «cerrar finalmente la puerta a un acuerdo», dijo el primero, y a dejar de hablar con Hamás, según el segundo. «No hay necesidad de hablar con Hamás. Hamás debe ser destruido. Sin ayuda humanitaria ni acuerdos de rendición», instó Ben Gvir en un mensaje en X.
Además, el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff, viajará a Europa para participar en una nueva ronda de negociaciones en busca de concretar ese alto el fuego, un paso que extrañamente implica a los europeos, a los que se les ha dado de lado siempre en este proceso. «El enviado especial Witkoff se dirige a Europa, donde se reunirá con líderes clave de Oriente Medio para debatir la propuesta de alto el fuego en curso para poner fin al conflicto en Gaza y liberar a los rehenes» israelíes en el enclave, dijo en una rueda de prensa.
La portavoz insistió en que estas son «negociaciones muy delicadas» y en que la posición de la Administración de Donald Trump es que «este alto el fuego se concrete lo antes posible y que estos rehenes sean liberados». Es un movimiento que ha hecho saltar las especulaciones sobre novedades en el proceso.
Desde el inicio de la ofensiva contra Gaza, hace ya más de 21 meses, Israel ha matado a más de 59.100 personas, entre ellas más de 17.000 niños, según datos del Ministerio de Sanidad gazatí. Estas cifras no incluyen ni los muertos por desnutrición, que ya superan el centenar, ni las miles de personas que siguen atrapadas entre los escombros.