El PP trata de fabricar de la nada una trama corrupta sobre el Gobierno y Huawei

‘Serpiente de verano’ es el término con el que se suele denominar a un fenómeno recurrente en agosto: justo cuando escasea la actualidad por las vacaciones estivales, desde los partidos o algunos medios de comunicación se intenta elevar a categoría de noticia o escándalo cualquier anécdota o trivialidad. Este año el PP ya tiene la suya y consiste en tratar de presentar como “una pieza más del entramado de corrupción ‘sanchista’” la adquisición por parte del Ejecutivo de un equipo de almacenamiento de la empresa de telecomunicaciones china Huawei.

Obviando los casos que han afectado a los gobiernos de José María Aznar o Mariano Rajoy, la dirección de Alberto Núñez Feijóo y el propio líder del PP llevan semanas tildando al Ejecutivo como el “más corrupto” de la historia, mezclando las acusaciones por supuestas mordidas a cambio de contratos públicos contra el exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, o el exministro José Luis Ábalos con las causas abiertas en los tribunales sin que existan pruebas concretas contra la esposa de Pedro Sánchez o contra el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, al que el Tribunal Supremo ha situado al borde del banquillo por la supuesta filtración del correo en el que la pareja de Isabel Díaz Ayuso confesaba su fraude fiscal.

Justo después de que estallara el escándalo sobre el exministro del PP Cristóbal Montoro, imputado por un supuesto caso de amaños de leyes a cambio de dinero, Génova 13 ha decidido tratar de enfangar al Gobierno en un supuesto nuevo caso. Este miércoles, el secretario general del PP habló de “una nueva derivada” e incluso de la “rama china” de la corrupción del Ejecutivo, aunque para ello ha utilizado las relaciones de España con Huawei, una empresa con la que también tienen vínculos los gobiernos autonómicos del propio PP, cuyos presidentes han llegado a alabar a la compañía recientemente.

Lo que denuncian los populares es la existencia de un contrato de 12,3 millones de euros adjudicado por el Ministerio del Interior a la multinacional china para adquirir los dispositivos de almacenamiento digital de las escuchas telefónicas ordenadas por jueces y fiscales. Según dijo este miércoles Tellado, la empresa está obligada por ley a entregarle al gobierno chino “todo lo que le pida”, lo que, a su juicio, compromete la seguridad nacional, ya que según la teoría del PP esas escuchas telefónicas podrían llegar al Ejecutivo del gigante asiático. “No es un episodio aislado, es una trama más”, apuntó Tellado.

En realidad lo que ha hecho el Gobierno es adquirir durante varios años equipos de almacenamiento a la empresa china, pero, según explica Interior “dichas adquisiciones nunca se han realizado directamente a Huawei, sino a las empresas nacionales e internacionales que figuran en el sistema dinámico, que se encuentran sometidas a la normativa de contratación nacional y disponen de las acreditaciones requeridas en el Esquema Nacional de Seguridad expedidas por autoridades de certificación independientes”.

Es decir, la contratación de estos sistemas de almacenamiento no comporta ningún riesgo para el material almacenado porque la empresa proveedora –en este caso, Huawei– no es la que almacena la información, sino que la misma se custodia en los centros de procesos de datos de Policía Nacional y Guardia Civil.

Zapatero, “reina madre” de la corrupción

Pese a todo, el PP cree que se trata de un contrato “turbio” y este miércoles Tellado incluyó sin pruebas en la supuesta trama al expresidente del Gobierno José Luis Rodriguez Zapatero, al que llamó “la reina madre de toda la corrupción del PSOE”, y al exministro de Fomento y exsecretario de Organización del PSOE, José Blanco, llegando a asegurar que con Santos Cerdán y Ábalos él sería el “tercer” secretario de Organización socialista con supuestas corruptelas.

Su argumento es que “Huawei contrató al lobby de José Blanco, Acento, para llevar sus relaciones con el poder en España” y que en Acento trabajó el ahora secretario de Estado de Telecomunicaciones, Antonio Hernando, antes de llegar a la Moncloa. “Hernando pasó de trabajar para Huawei al Gabinete de Sánchez que ha dado a Huawei contratos millonarios muy sospechosos y su mujer pasó de trabajar para Huawei, a través de Acento, a ser una de las sustitutas de (Santos) Cerdán en la dirección del PSOE”, afirmó Tellado. Hernando nunca ha trabajado para Huawei, sino que lo hacía para Acento.

Otro de los argumentos de Tellado es que Blanco es “íntimo de Zapatero y primer mentor de Sánchez”. Y Zapatero es “el perejil de todas las salsas, la sombra detrás de cada atropello de Sánchez al Estado de Derecho y las arcas públicas, sean en Suiza o en China. Siempre está Zapatero” destacó. “Ya no hay dos secretarios de organización involucrados, sino probablemente tres”, agregó. El PP ha pedido que Hernando comparezca en el Congreso, además de los ministros de Defensa, Exteriores e Interior.

La inquina con la que ahora el PP se refiere a Huawei choca con la actitud complaciente que ha mantenido el partido con la compañía china. Hace justo un año, en agosto de 2024, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, viajó a Pekín y visitó las instalaciones del gigante de las telecomunicaciones. “Es una referencia mundial de la ‘marca China’ en el mundo”, dijo allí, que “contribuye al liderazgo chino en tecnologías de las telecomunicaciones y en la producción de circuitos integrados y componentes electrónicos”.

Las inversiones de Huawei alabadas por el PP

En 2022, el presidente murciano, López Miras, celebraba la inversión del gigante chino de las telecomunicaciones en Murcia para abrir un laboratorio de innovación, y así lo anunció a través de un comunicado, después de reunirse con su CEO en España. Y un año antes, Ayuso inauguró un centro de alto rendimiento de la propia Huawei para prestar servicios y apoyo a las empresas de telecomunicaciones desde Madrid a Alemania, Reino Unido, Francia o Italia. “Proyectos como este suponen la creación de más de 200 puestos de trabajo de alta cualificación y un impulso a nuestra región a la que sitúan como referente tecnológico y digital del continente”, dijo ella.

Pero quien más fervientemente ha defendido a Huawei desde el PP ha sido su portavoz en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons. En un artículo de opinión publicado en El Confidencial en 2020, Pons defendía la presencia de la compañía china en la Unión Europea y en España por ser entonces la más avanzada en materia de 5G e inteligencia artificial.

“En ningún caso es aceptable la presión que está ejerciendo EEUU contra la UE para que vetemos, como ha hecho Trump, la participación de Huawei en el desarrollo de las infraestructuras de 5G. Tengo la sospecha de que detrás de esas amenazas no hay tanta preocupación por la seguridad como miedo a perder en favor de China y quizá de Europa la ventaja competitiva que ahora ostentan sus empresas en la economía digital. No podemos quedarnos fuera de la carrera solo para beneficiar a EEUU. Nosotros también aspiramos a liderar la inteligencia artificial”, escribió.

“Hoy por hoy, sin Huawei no hay 5G posible en Europa y no sé si debemos permitirnos el retraso que conllevaría semejante veto. No podemos quedarnos fuera de la carrera solo para beneficiar a EEUU. Nosotros también aspiramos a liderar la inteligencia artificial. No somos la colonia digital de nadie”, añadía González Pons.

Cinco años después, su partido utiliza a esa misma empresa para tratar de fabricar de la nada una nueva supuesta trama corrupta contra el Gobierno, dando a entender que esa misma Huawei alabada por Ayuso, Moreno o Pons es una suerte de herramienta de espionaje chino al que el Gobierno quiere ayudar a través de Zapatero, el expresidente al que el PP vincula con todos los males del país y de parte del extranjero.

Pasará agosto y las durísimas acusaciones de los populares contra la compañía tecnológica y el Gobierno serán sustituidas por nuevas palabras altisonantes, en la estrategia del ruido y del “quien pueda que haga” ideada por José María Aznar para atacar al Gobierno progresista por todos los frentes, incluso inventados. Lo de Huawei y el Gobierno será otra serpiente de verano más que el PP utilizó para llenar titulares durante la canícula.