Lux sigue dando que hablar. De música, de cultura en general y también de lengua. El cuarto álbum de estudio de Rosalía ha despertado duras críticas, en las últimas horas, entre sectores del nacionalismo catalán por su canción Magnolias.
El tema que cierra el disco, en el que la artista habla de la muerte y del funeral en primera persona, incluye una colaboración de la Escolanía de Montserrat en castellano que se ha convertido en objeto de polémica a causa de la tradicional identificación de la Abadía de Monsterrat con el catalanismo.
El nuevo álbum de la cantante nacida hace 33 años en Sant Esteve Sesrovires (Barcelona) se filtró en internet el pasado miércoles (el martes ya había pasado durante unos minutos con la canción Reliquia), dos días antes de la fecha elegida para su publicación, este viernes 7 de noviembre. Desde entonces se han sucedido los reproches a Rosalía por el idioma en el que canta el famoso coro infantil, uno de los más antiguos de Europa.
«La decadencia españolizadora de Montserrat es de las peores noticias que sufre este año el país», ha expresado en redes sociales Josep Lluís Alay, jefe de la oficina del ex presidente de la Generalitat y líder de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont. Un mensaje que entronca con las sonoras críticas que recibió la abadía benedictina en junio, cuando los Reyes Felipe VI y Letizia visitaron el monasterio con motivo de la celebración del milenario de su fundación.
«La autoinvitación de los Reyes españoles a Montserrat es una provocación y lo saben, es parte del plan para españolizar el país y son conscientes tanto en Madrid como a ambos lados de la plaza de Sant Jaume, que colaboran con entusiasmo», expresó entonces el propio Puigdemont en alusión al Gobierno de Pedro Sánchez y a la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona, en manos del PSC. En la misma línea, el presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, calificó la visita del Jefe del Estado a la abadía como «una falta de respeto a Cataluña».
Rosalía canta en 13 lenguas en su nuevo disco y, de hecho, el catalán es protagonista del tercer tema, Divinize, en el que lo combina con el inglés. En el año 2019, la artista grabó su primer sencillo en el idioma autonómico, Milionària, inspirado en la rumba catalana y que formó parte del EP Fucking Money Man.
En medio de la polémica por Magnolias, el ex director de la Escolanía de Montserrat Bernat Vivancos dijo en Rac1: «Como cualquier otro coro catalán, la Escolanía no sólo canta en catalán, sino también en latín y en otros idiomas». «La Escolanía tiene grabaciones de antiguos maestros que son obras compuestas en castellano y que se cantan a menudo en Montserrat», añadió el compositor y profesor musical.
Catalunya Ràdio
Otra de las polémicas críticas a la cantante y productora barcelonesa se han podido escuchar desde los micrófonos de la emisora pública Catalunya Ràdio, donde la comunicadora e influencer Juliana Canet expresó su decepción por el idioma empleado en el último tema de Lux. «Es una humillación para los catalanes y para ella misma, es una falta de respeto y es comprar un marco españolista hasta el fondo», se quejó la colaboradora del programa de crónica social Que no surti d’aquí.
Canet ya había criticado a la artista de Sant Esteve Sesrovires por la elección de Madrid para el anuncio del disco que hizo hace dos semanas. «No tienes vergüenza, esperábamos más de ti», le espetó tras el show en la plaza de Callao. Anteayer, Rosalía organizó una exclusiva listening party del álbum en Barcelona, en el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC).
Identificada con el independentismo catalán, Canet ya había protagonizado algún episodio polémico anteriormente en medios públicos. En febrero de 2021, durante las manifestaciones en Barcelona contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasel [condenado por enaltecimiento del terrorismo e injurias y calumnias contra la Corona y las instituciones del Estado] que acabaron varios días con incidentes en las calles, la comunicadora defendió aquellos actos vandálicos en el programa Tot es mou de TV3 como «violencia justificadísima».
