El grupo surcoreano Naver ofrece 600 millones por la española Wallapop

El grupo surcoreano Naver, que ya posee aproximadamente el 22% de Wallapop, se encuentra en negociaciones avanzadas para adquirir la totalidad de empresa por 600 millones de euros, según ha adelantado La plataforma de compraventa de productos de segunda mano es una de las start-ups españolas con más posibilidades de convertirse en unicornio (como se conoce a las que superan la valoración de 1.000 millones de euros).

La operación ha despertado críticas entre los socios minoritarios por considerarse una cifra insuficiente para una de las startups más prometedoras del país, que terminaría además en manos de un grupo extranjero. Esta valoración representa una caída de 206 millones respecto a la última ronda de financiación en febrero de 2024, en la que entraron inversores institucionales como el ICO y se fijó un precio total de la empresa dea 806 millones.

Según informa el citado medio, el fondo 14W, que posee cerca del 20% de la compañía, ha rechazado la propuesta. Otros inversores significativos como Insight Venture Partners y Accel, con participaciones del 15% cada uno, también mostrarían reticencias.

En la última ronda de financiación de febrero de 2024, Wallapop amplió su financiación en 20 millones de euros con la participación del fondo público AXIS a través del programa Fond-ICO Next Tech. También participaron Korelya Capital —respaldado por Naver— y otros fondos que ya habían invertido en rondas anteriores, como la de 2021, cuando se captaron 157 millones, valorando Wallapop en unos 690 millones.

Preocupaciones sobre conflictos de interés

La operación también ha generado inquietudes sobre posibles conflictos de interés, dado que Naver mantiene vínculos estrechos con Korelya Capital, lo que podría comprometer la transparencia del proceso de venta. Expertos del sector consideran injustificado que Wallapop tenga una valoración menor que hace un año, especialmente tratándose de una plataforma con fuerte penetración en el mercado español.

El caso recuerda a la controvertida venta de Glovo a Delivery Hero, también accionista previo, que fue percibida como una adquisición a precio reducido aprovechando las dificultades de la empresa española. Una situación que refuerza la percepción de que España no está logrando capitalizar adecuadamente sus éxitos tecnológicos.

El papel del ICO, clave en la operación

La atención se centra ahora en la posición que adoptará el ICO (Instituto de Crédito Oficial), que debe pronunciarse sobre la operación. Al tratarse de una institución pública vinculada al Ministerio de Economía, se espera que actúe en consonancia con su objetivo de respaldar la innovación, el empleo y el crecimiento de empresas tecnológicas españolas.

La presión por obtener liquidez tras años de sequía en el mercado de inversión tecnológica podría estar influyendo en la decisión de venta, según analistas del sector. Sin embargo, la operación plantea interrogantes sobre si España está perdiendo oportunidades de mantener el control de sus empresas tecnológicas más prometedoras.

Wallapop, fundada en 2013, se ha consolidado como una de las plataformas de compraventa de segunda mano más populares en España, con millones de usuarios activos que utilizan la aplicación para comprar y vender productos usados entre particulares.