La piscina municipal de Porrentruy, una localidad suiza del cantón del Jura, ha decidido este verano prohibir el acceso a las personas que no tengan nacionalidad suiza, permiso de trabajo o de residencia tras varios incidentes por comportamientos incívicos y exceso de aforo, según ha informado el medio FOCUS online, que ha agregado que «lo que suena drástico tiene un efecto».
El Ayuntamiento de Porrentruy informó el 2 de julio en un comunicado de que «ha decidido restringir el acceso a la piscina al aire libre como medida de precaución y por un periodo limitado» para garantizar la seguridad de los bañistas. La medida implica que desde el 4 de julio al 31 de agosto solo podrán acceder a la piscina «los nacionales suizos, titulares de un permiso de residencia y titulares de un permiso válido de trabajo suizo».
El consistorio explicó que ha adoptado esta prohibición por «las altas temperaturas y la extrema afluencia de personas en los últimos días», además de «comportamientos inadecuados, incivismo y falta de respeto a las normas vigentes en la piscina». En concreto, recuerdó que ha expulsado con anterioridad a «más de una veintena de personas» por los citados comportamientos.
La prensa francesa se hizo hecho eco de esta medida por considerar que afecta, en gran medida, a ciudadanos franceses que cruzan la frontera para acudir a esta piscina, aunque en declaraciones a los medios, el alcalde de Porrentruy negó que se tratase de una medida discriminatoria, según ha informado Maldita.es.
Esta no es la primera vez que esta localidad adopta esta medida, sino que ya la puso en práctica en el verano de 2020, en parte por la situación de emergencia sanitaria derivada de la pandemia de la covid-19, pero también por la identificación de comportamientos incívicos, como reportaron algunos medios.