Apretones de manos, sonrisas y hasta una alfombra roja en la cumbre de Trump y Putin: ¿gana Rusia y pierde Ucrania?

Lo previsto. Si Donald Trump creía que iba a lograr que Vladimir Putin cambiara de opinión sobre el futuro de la guerra en Ucrania y acudiera a la cumbre de Anchorage (Alaska) dispuesto a firmar un acuerdo de paz, las dudas se han ido despejando en los «primeros minutos»- a los que el inquilino de la Casa Blanca hizo referencia hace unos días- de encuentro entre ambos mandatarios.

La reunión, pese a no haber terminado con un acuerdo claro entre ambos líderes sobre un alto el fuego en Ucrania, ha dejado imágenes que acompañarán al presidente norteamericano durante los próximos meses y años. Ya sea por un fin del conflicto- que todavía parece lejano- o por la continuidad del mismo tras más de tres años.

Putin aterrizó en la base aérea Elmendorf-Richardson a las 20.54 horas en España, (10.54 horas en Anchorage). Al bajar la escalinata le esperaba Trump. Antes de ponerse frente a frente, el líder norteamericano le recibió efusivamente, con aplausos y deseando estrechar su mano con su homólogo ruso– como si nada hubiese cambiado en las relaciones entre ambos países-.

Fue el propio inquilino de la Casa Blanca el que le tendió la mano y el líder del Kremlin no dudó ni un momento en ceder a la efusiva bienvenida. Ambos recorrieron una alfombra roja- como si de los Óscar se tratara- y antes de llegar a un podio con las letras ‘Alaska 2025’ han pasado varios aviones norteamericanos. En concreto, un bombardero B-2 Spirit y cuatro F-35.

Sonreía Trump y Putin ya se sentía cómodo. Parecía que en los primeros minutos del encuentro, antes de subirse al coche que les llevaría al lugar dónde iban a mantener la denominada cumbre ‘buscando la paz’- lema elegido por Washington-, habían dado una muestra de lo que sería el encuentro. Trump contento, Putin cómodo y ninguna decisión oficial para poner fin a la guerra.

«Una reunión muy productiva», pero sin anuncio

Tras tres horas de cara a cara, ambos mandatarios han ofrecido una conferencia de prensa conjunta sin preguntas de los periodistas. Los cientos y cientos de reporteros que llevaban esperando bastante tiempo en Anchorage a poder plantear algunas de las cuestiones que llevaban tiempo en el tintero, se iban a ir con las mismas ganas con las que llegaron.

Trump ha asegurado que la reunión ha sido «muy profunda» y «muy productiva». «Acordamos muchísimos puntos. En la mayoría de ellos, diría que hay un par de puntos importantes en los que aún no hemos llegado a un acuerdo, pero sí hemos avanzado», ha señalado, sin ofrecer más detalles sobre en qué han coincidido.

Aunque todavía no se sabe cuáles son los acercamientos, el inquilino de la Casa Blanca ha afirmado que llamará a la OTAN, al presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, para informar sobre los puntos tratados en la reunión. Pero ha reiterado que ahora el balón está en el tejado de Kiev.

Pese a que no hay ningún anuncio oficial, Trump ha reiterado que hay «muchas posibilidades» de lograr un acuerdo para poner fin a la guerra en Ucrania, aunque lo que ha destacado por encima de todo ha sido su «fantástica» relación con Putin.

Trump, de acuerdo «en gran medida» sobre intercambiar territorios

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado estar de acuerdo «en gran medida» con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre un intercambio de territorios entre Ucrania y Rusia. Algo que ya defendió hace una semana desde Washington.

En una entrevista posterior en la cadena de televisión Fox News, el líder republicano ha asegurado que «esos son puntos que negociamos». «Son puntos en los que, de hecho, estamos de acuerdo en gran medida. Creo que hemos coincidido en muchas cosas. Y puedo asegurarte que la reunión fue muy cordial», ha expresado, sin dar más detalle. 

Un planteamiento que el propio Zelenski ya rechazó hace unos días. «Ucrania está lista para tomar decisiones reales que traigan la paz», pero, aseguró, «no recompensaremos a Rusia«. «La respuesta a la cuestión territorial ucraniana ya está en la Constitución de Ucrania. Nadie se apartará de ella, ni podrá hacerlo. Los ucranianos no cederán sus tierras al ocupante«, añadió.

Aunque ambos mandatarios se han emplazado a tener una segunda reunión para abordar la situación en Ucrania, Putin ha aprovechado la ocasión para invitar a Trump a llevarla a cabo en Moscú (Rusia).

Lo que es evidente es que el efusivo recibimiento del líder estadounidense a su homólogo ruso, la alfombra roja, los chascarrillos y la escenografía ha sido completamente diferente a la ‘encerrona’ que la Casa Blanca le hizo hace unos meses a Zelenski, tras su viaje a Washington.

Pese a que se desconocen los detalles principales y los «puntos que negociamos», lo que está claro es que ambos han salido vencedores. Trump, con sus continuas sonrisas y logrando hacerse la foto con el líder ruso en suelo estadounidense y una ‘mini’ victoria moral para Putin, por acudido a la cita y haberse mantenido vigente en la postura y la idea que el Kremlin lleva tiempo defendiendo. No hay avances, a priori, pero la posibilidad de que Kiev ceda a algunas de las insistentes peticiones de Moscú para lograr la paz, plantea serias dudas sobre si Ucrania no sale tocada- sin que ningún representante haya estado presente-.