Ucrania revela su as en la manga detrás de su audaz ataque con drones que Moscú no vio venir

El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) ha logrado sorprender a las tropas rusas con la Operación Spider Web, una operación especial de gran envergadura llevada a cabo el 1 de junio de 2025 y que ha sido calificada como un rotundo éxito por el propio director del SBU, Vasyl Malyuk

En una entrevista concedida al canal ‘Mi Ucrania’, Malyuk explica que el éxito de la operación se debió a la «singular simbiosis de los componentes de inteligencia y tecnología» utilizados para su ejecución. La operación ‘Web’ incluyó una serie de pasos complejos y multidimensionales, con la entrega de 150 drones de combate FPV a la retaguardia enemiga y un trabajo logístico de gran precisión.

Asimismo, subraya que la operación no solo dependía de la entrega de equipos, sino también de la colaboración de distintas áreas operativas como inteligencia, comunicaciones y gestión de recursos. Para llevar a cabo la misión, el SBU creó una empresa encubierta en Cheliábinsk (Rusia), desde donde se adquirieron camiones y se organizaron diversas cargas para consolidar el trabajo logístico en territorio enemigo, sin levantar sospechas.

Uno de los aspectos más innovadores de la operación  fue el diseño de los drones utilizados. A simple vista, estos drones FPV podrían parecer comunes, pero estaban equipados con «varios tipos de comunicación» y un potente componente explosivo. Malyuk detalla que cada dron contenía una mezcla especial desarrollada específicamente para la misión, capaz de «quemar el fuselaje de la aeronave enemiga y provocar una explosión en su interior». 

Los ucranianos fueron capaces de neutralizar un tercio de la aviación estratégica de la Federación Rusa, con un total de 41 aviones destruidos, dejando evidencia así de la «vulnerabilidad de los sistemas de defensa aérea tradicionales», afirma a Newsweek Yaniv Benbenisti, director de productos de D-Fend Solutions, una empresa de tecnología antidrones que analizó la operación.

La complejidad de la operación, que se llevó a cabo en condiciones extremas, incluyendo temperaturas bajo cero, también implicó desafíos logísticos, como el traslado de los equipos en condiciones climáticas adversas. Malyuk menciona que, para lograrlo, los agentes ucranianos atravesaron lo que describió como las «siete etapas del infierno».

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se implicó de manera directa en el desarrollo de la operación, manteniendo una comunicación constante con el SBU y acelerando ciertos procesos para garantizar la rapidez de la ejecución: «Estuvo en contacto con nosotros en todo momento. También se interesó por detalles individuales muchas veces antes y, francamente, aceleró las cosas en algún punto«.