«¡Al diablo con Spotify!», el adiós a la plataforma de un puñado de artistas por culpa de las armas

King Gizzard & the Lizard Wizard es un grupo australiano de rock psicodélico con decenas de discos y canciones que ya no se podrán escuchar en Spotify. La prolífica banda de rock australiana ha retirado casi todo su catálogo de la plataforma de streaming sin hacer demasiado ruido. Lo decidieron y se acabó.

El grupo lo anunció con un «¡al diablo con Spotify!» en una puiblicación en su cuenta de Instagram mientras promocionaban una nueva colección de demos exclusiva para Bandcamp. Sorpresa entre sus seguidores que aplaudían la decisión, pero también pedían explicaciones, unas explicaciones que llegaron más tarde y que poco tenían que ver realmente con un conflicto empresarial sino más bien ético, algo parecido a lo que les sucedió a grupos como Deerhoof y Xiu Xiu.

La explicación llegó después también a través de Instagram: King Gizzard & the Lizard Wizard se oponen a las inversiones militares realizadas por el cofundador y director ejecutivo de Spotify, Daniel Ek, a la empresa de defensa militar, Helsing.

«Hola amigos:

Un anuncio de servicio público para quienes no lo saben: el director ejecutivo de Spotify, Daniel Ek, invierte millones en tecnología de drones militares con inteligencia artificial.

Acabamos de eliminar nuestra música de la plataforma.

¿Podemos presionar a estos hermanos tecnológicos del Dr. Evil para que lo hagan mejor?

Únete a nosotros en otra plataforma».

Con este mensaje la banda australiana se sumaba a otros artistas que también mandaron al diablo a Spotify. A principios de julio era la banda estadounidense Deerhoof la que anunciaba su intención de abandonar Spotify debido a la inversión de 700 millones de dólares realizada por Daniel Ek en una empresa de tecnología militar con inteligencia artificial. Según comunicó el grupo, esta situación les generaba un conflicto ético, ya que no quieren que su música esté vinculada a proyectos relacionados con tecnología militar ni que contribuya a la violencia.

Deerhoof también criticó la presencia creciente de música generada por inteligencia artificial en plataformas y cuestionó el modelo de negocio de Spotify, al que consideran perjudicial para artistas y usuarios. Su postura fue muy clara: «No queremos que nuestra música mate gente». Y calificaron a Spotify como un «timo de minería de datos».

Xiu Xiu, la banda californiana de punk industrial y pop experimental conformada por Jamie Stewart, Angela Seo y David Kendrick, también dijo adiós a Spotify siguiendo los pasos de Deerhoof. La razón, también ética, en protesta por la inversión millonaria de Ek en una empresa alemana de Inteligencia Artificial orientada al ámbito militar.

«Actualmente estamos trabajando para retirar toda nuestra música del portal infernal de basura y apocalipsis violento que es Spotify. Está llevando más tiempo de lo esperado debido a complicaciones de procedimiento, pero se completará pronto. Gracias por el apoyo y la paciencia. Por todas las razones que ya conocéis, por favor, cancelad vuestra suscripción con Spotify», declaró Xiu Xiu.

Además, más allá de la inversión de su CEO en el desarrollo de armas de inteligencia artificial, los artistas están boicoteando la plataforma de música por apenas pagar a los autores una parte justa por la música que suben. Según varios informes, Spotify paga a sus artistas entre 0,003 y 0,005 dólares por reproducción, lo cual, a diferencia de competidores como Tidal, Anghami y Apple Music, es bajo.

En marzo pasado era Snoop Dogg el que abandonaba definitivamente Spotify. Eso sí, por motivos más económicos que éticos. Según explicó, dejaba la plataforma tras alcanzar mil millones de reproducciones en ella, y recibir un pago demenos de 45.000 dólares, una cifra que consideró irrisoria. «No quiero tener nada que ver con Spotify, ahora solo estoy en Tune.FM», declaró. Curioso, pues no apostó por Tidal o por Apple Music, sino por Tune.FM, un servicio de streaming basado en blockchain. Es decir, ofrece pagos instantáneos y en criptomonedas.