Uno de los medios más leídos en Alemania, como es el Bild, ha revelado el contenido de una lista confidencial en base a la cual, Ucrania habría pedido al país germano un gran paquete de ayuda militar que estaría valorado en miles de millones de euros. Según el documento, filtrado por el medio ucraniano Pravda Europea, incluye peticiones concretas en tres frentes clave: sistemas de defensa aérea, vehículos blindados y capacidades de guerra electrónica.
Desde que Friedrich Merz asumió el liderazgo del gobierno alemán, Berlín ha dejado de publicar detalles sobre los nuevos envíos de armamento a Kiev. Algo similar ocurre por parte de las autoridades ucranianas, que han optado por mantener en secreto la información sobre la asistencia militar recibida por Berlín.
Pese a ello, fuentes militares diferentes y del sector industrial consultadas por el medio alemán, confirmaron la existencia de este documento, presuntamente entregado por el Gobierno ucraniano a sus interlocutores en Alemania.
En lo que respecta a las peticiones, Kiev reclama cuatro nuevos lanzadores del sistema IRIS-T, así como 1.500 misiles guiados para la versión de alcance medio y otros 500 para el modelo de corto alcance. La petición también incluye 200.000 proyectiles antiaéreos de 40 mm, destinados a reforzar la defensa contra drones rusos.
Kiev y Berlín guardan silencio
En cuanto a los vehículos, Ucrania pide mil unidades antiminas, 200 blindados de oruga con diversas configuraciones, 30 vehículos especializados en desminado y unos 30 tanques de ingeniería WiSENT, diseñados para abrir paso en terrenos hostiles. A esto se le sumarían 200 todoterrenos pensados para las fuerzas especiales.
Por último, en tercer lugar se hace referencia a las necesidades ucranianas respecto a la guerra electrónica. De acuerdo con la información publicada, Kiev habría solicitado mil inhibidores de señales GPS, elemento clave para neutralizar drones enemigos, y 200 radares móviles para tareas de vigilancia y localización de objetivos sobre el terreno.
Ante este aluvión de peticiones, el Ministerio de Defensa alemán no ha querido desvelar detalles. «Por motivos de seguridad y siguiendo la nueva política de comunicación del Gobierno federal sobre el apoyo a Ucrania, no hacemos declaraciones sobre tipos concretos de asistencia», fue la respuesta oficial.
Esta revelación coincide con los últimos anuncios del ministro de Defensa, Boris Pistorius, quien en junio prometió una nueva partida de ayuda militar valorada en 1.900 millones de euros. Además, Berlín mantiene conversaciones con Washington para facilitar el envío de más sistemas Patriot a Ucrania, en lo que supondría un refuerzo significativo de sus defensas aéreas.
Aunque la lista no ha sido reconocida públicamente por las partes, su contenido ofrece una visión clara de las prioridades de Kiev en plena guerra de desgaste con Rusia: protección del espacio aéreo, movilidad sobre el terreno y capacidad tecnológica para hacer frente a las amenazas del siglo XXI.