El Partido Popular ha reunido a varias decenas de miles de personas en la Plaza de España de Madrid bajo el lema “mafia o democracia” y la exigencia de un adelanto electoral que, ha reconocido el propio Alberto Núñez Feijóo, no va a producirse. “Que Sánchez pregunte a los españoles si quieren un gobierno de koldos, leires o jesicas o de gente honrada y gente decente”, ha clamado sin mencionar la palabra “mafia”, en la convocatoria de la manifestación, durante todo su discurso. Antes que él, y recabando más aplausos y vítores, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha anunciado que España se encamina a una “dictadura” y ha aludido veladamente a los problemas legales de su pareja, procesado por fraude fiscal, o la causa en la que estuvo imputado el músico Nacho Cano.
Decenas de miles de personas –50.000 según Delegación del Gobierno, el doble según el PP– han abarrotado la Plaza de España con las banderas, gorros y abanicos que repartían voluntarios del PP en carpas alrededor del recinto. Pancartas con mensajes como “ni mafia ni sanchocracia”, gritos de “Pedro Sánchez dimisión” y las caras de Koldo García, José Luis Ábalos o Leire Díez mirando desde las pantallas gigantes instaladas.
También mostraban al empresario Víctor de Aldama, imputado en el caso Koldo y varias causas de fraude fiscal masivo que, recientemente, ha instado a Feijóo a tomar la iniciativa para sacar a Sánchez de la Moncloa. La animación musical ha alternado canciones que aludían a la “mafia”, como ‘Venecia’ de los Hombres G o ‘Mentirosa’, canción que sonaba cuando Feijóo y Ayuso han entrado a la plaza. También ha sonado ‘Lady’, de Modjo, cuando el animador ha intentado que la gente sustituyera el título de la canción por ‘Leire’.
“He pedido no ondear las siglas de un partido”, ha dicho Feijóo al principio de su discurso mientras una gigantesca bandera del PP ondeaba justo detrás de su cabeza en una plaza plagada de carpas del Partido Popular y cargos públicos y orgánicos del Partido Popular. “Estáis aquí sin pertenecer a ningún partido político”, ha seguido. Un discurso en el que ha pedido elecciones generales, ha aludido a la “corrupción” y la “cloaca” pero no ha mencionado ni una sola vez el término “mafia” que la convocatoria de su partido ha ubicado en lo más alto del eslogan de la concentración.
Tras lamentar el enfrentamiento al que, asegura, ha conducido el gobierno del PSOE, ha conminado a “cada español” a “tomar partido entre ser cómplices o no, entre los desmanes y la limpieza, entre la decadencia y la decencia”. “O se está con la impunidad o con la honestidad y el respeto al otro”, ha añadido en otro momento.
Arropado por los expresidentes José María Aznar y Mariano Rajoy, Feijóo ha denunciado la “cloaca” sin mencionar el origen del término en la política española: la estructura policial paralela que durante los gobiernos, precisamente, de Mariano Rajoy, usó recursos policiales para espiar a rivales políticos, crear informes falsos e, incluso, borrar pruebas comprometedoras para el PP en tramas como Gürtel, surgidas y asentadas en época de Aznar y Rajoy.
Mucho más duros han sido en sus discursos los anfitriones de Feijóo: Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida. La presidenta madrileña, que ha recabado muchos más aplausos y vítores que el líder del partido, ha querido congraciarse con las lenguas de todo el país después de levantarse de la mesa en la conferencia de presidentes del pasado viernes cuando algunos de sus compañeros de partido, presentes este domingo en Madrid, usaban por ejemplo el gallego.
“Aquí nadie es forastero. En Madrid oímos todos los acentos del español, nuestra riqueza que también pasa por las lenguas cooficiales en otras regiones”, ha dicho. Ayuso ha vuelto a marcar perfil propio frente a Feijóo, mucho más contundente y hablando abiertamente de una dictadura en España: “Lo que le faltaba a España es un gobierno corrupto, sin principios. Eso se llama mafia”, ha dicho, ella sí mencionando el término de cabecera de la manifestación. Entre las cosas que hacen de España una mafia, ha explicado Ayuso, están “operaciones de estado cutres, tramas contra adversarios, jueces, empresarios” y asegurando que “el que discrepa está acabado, sea periodista, artista o ciudadano anónimo”.
El término “ciudadano anónimo” es el empleado habitualmente por Ayuso y el PP para referirse al caso de Alberto González Amador, su pareja, recientemente procesado por fraude fiscal. El “artista” que más abiertamente ha mostrado su apoyo a Ayuso es Nacho Cano, hasta hace pocas semanas imputado en una causa judicial sobre las condiciones en las que mantenía a los becarios de su musical Malinche, diligencias ya archivadas.
En una convocatoria en la que los habituales agitadores de extrema derecha han ejercido con sus micrófonos de una forma mucho menos agresiva que la que despliegan habitualmente en el Congreso de los Diputados, Feijóo ha clamado por una convocatoria electoral: “España ya sabe demasiado lo que han hecho y seguiremos sabiendo más”, ha vaticinado. “Ríndase a la democracia. Convoque elecciones, las queremos ya, porque nadie le votó para hacer esto, ni los suyos”, ha explicado antes de terminar su discurso.
Los discursos han apuntado, sin embargo, a que el PP no cuenta con que Sánchez adelante los comicios hasta la fecha establecida en 2027: “Que nadie os diga que esta concentración no sirve para nada, luchar para recuperar la decencia en nuestro país es una causa noble. Sentiros orgulloso de defenderla hasta que podáis acabar con esto en las urnas democráticamente”.
“Las dictaduras entran a sorbos”
Mucho más duro ha sido el discurso de Isabel Díaz Ayuso y el del alcalde José Luis Martínez-Almeida. “Las dictaduras entran a sorbos, poquito a poquito, de manera aparentemente inofensiva”, ha dicho la presidenta madrileña. España, ha añadido, se adentra por “la peligrosísima senda de la dictadura de las minorías, de los resentidos, de los vividores de lo público, de los recaudadores profesionales, del negocio corrupto identitario”, ha dicho. “Cuando la democracia popular suplanta a la liberal se entra en dictadura”.
En la misma semana en la que Esperanza Aguirre, una de sus grandes valedoras políticas actuales frente a Feijóo, ha llegado a afirmar que la dictadura franquista fue mejor que la segunda república, Ayuso ha aludido también al franquismo: “Alentando con millones de euros los fantasmas del pasado, un pasado que ni siquiera hemos vivido la mitad de los que estamos aquí”.
El alcalde también se ha referido al eslogan de la manifestación que Feijóo ha evitado. “Están un tanto enfadados, no les gusta el lema, dicen que no entienden lo de ‘mafia o democracia’”, ha dicho antes de apuntar a la Torre Madrid. “Ahí Jéssica tenía su nidito de amor con Ábalos pagado con el dinero de todos vosotros”. “La mafia cuanto más acorralada, más peligrosa”, ha vaticinado el regidor madrileño. También se ha referido veladamente al caso de la pareja de Isabel Díaz Ayuso: “Lo que crispa es que la Fiscalía General se use contra una adversaria política”.
Almeida ha sido el primero en explicar que no confían en que llegue el adelanto electoral que minutos después ha reclamado el presidente de su partido. “No sabemos cuándo serán las elecciones generales”, ha dicho. Feijóo también lo ha dado por hecho: “Cualquier persona decente habría devuelto la palabra a los españoles, pero no escogerá esta salida honrosa”. Tres años y tres meses después de ponerse al frente del PP, Alberto Núñez Feijóo ha anunciado que la lucha empieza este domingo: “Para esa revolución que comienza hoy cuento con todos los ciudadanos honestos y libres de nuestro país”.