Este sábado, 5 de abril, miles de personas se reunirán en las calles de un total de 40 ciudades de todo el país bajo el lema ‘Acabemos con el negocio de la vivienda’. Esta movilización, impulsada por una amplia variedad de organizaciones que forman parte del movimiento por el derecho a la vivienda, busca poner fin a la creciente problemática de los altos precios del alquiler y la especulación inmobiliaria.
Desde los Sindicatos de Inquilinas han hecho un llamamiento a la participación masiva en la jornada de protesta del próximo sábado. Este 5 de abril, apuntan, el objetivo es ampliar la presión social con una movilización coordinada en todo el Estado, para avivar la urgencia de cambiar “un sistema rentista que ha convertido la vivienda en un bien de lucro en lugar de un derecho básico”.
La creciente crisis de los precios del alquiler, “que empuja a muchas familias a vivir en condiciones precarias”, ha encendido la indignación popular. En las ciudades turísticas, la situación es aún más crítica, ya que el modelo de alquiler de temporada y la actividad turística “expulsan a los residentes de sus barrios, además de precarizar las condiciones laborales de quienes trabajan en este sector”, manifiesta el Sindicato de Inquilinas de Madrid.
La necesidad de una bajada de alquileres y cambios estructurales
La organización sindical ha identificado varios problemas clave que deben ser abordados con urgencia. Uno de los principales reclamos es la bajada de los alquileres en un 50 por ciento. Con los precios alcanzando “niveles insostenibles”, la plataforma manifiesta que una reducción drástica de los alquileres sería un primer paso fundamental para frenar el abuso inmobiliario y garantizar el acceso a una vivienda digna.
En paralelo, también demandan la recuperación de viviendas vacías, turísticas y de temporada, que actualmente “no cumplen con su función social, sino que están destinadas a fines lucrativos”. Una situación que, aseguran, deja y está dejando a muchas personas sin hogar.
A su vez, el fin de la especulación en la compra de la vivienda es otra de las grandes reivindicaciones. “La vivienda no puede seguir siendo tratada como una inversión que genere beneficios a unos pocos”: así lo denuncia la plataforma. Reclaman que se prohíba la compra de viviendas con fines especulativos, ya sea por parte de grandes fondos de inversión o “individuos rentistas”.
En este sentido, también se exige la desarticulación de los grupos de desokupación, que recurren a prácticas “violentas” para desalojar a inquilinos y ocupantes, un fenómeno que, desde el sindicato, piden que sea erradicado de inmediato.